Éste no es un ensayo sobre estar en contra o a favor del aborto. Más bien para hablar de algo más profundo. Mi título puede parecer difícil de interpretar, por eso empezare desde cero.
Según el famoso libro de Queen bees and Wannabes, que inspiró la famosa película Mean Girls, existen reglas en el mundo de las mujeres, no escritas, pero que todas entendemos; algunos ejemplos: respetar a los novios de tus amigas, ir juntas al baño y siempre decirse mutuamente lo delgadas que se ven.
En el mundo de las niñas bien Mexicanas también existen reglas. Sí, se que no es nada nuevo, que Guadalupe Loeza, ya hizo un libro sobre eso; pero en éste artículo hablaremos específicamente de los temas, que a las niñas mexicanas se les permite o no discutir en su circulo social.
Nadie sabe, si las reglas fueron escritas por La Guera Rodríguez ó Amada Díaz. Pero poco han cambiado en los últimos años.
El primer tema prohibido, es hablar sobre tu vida íntima, es más, debes fingir que te sonrojas cuando alguna de tus amigas se atreve a sacar un tema como éste . Si quieres una toalla femenina, debes pedirla en secreto, como si fueras a hacer algo malo en en baños con el pedazo de gasa. Los traumas, acoso o violencia familiar no debes platicarlos tampoco, pues alterarás el equilibrio de los grupos de amigas.
Tampoco debes sonar muy inteligente, tu obsesión por los periodos de la era mesosoica o los escritores rusos, debe quedarse en casa. Formar un debate sobre política Mexicana, ni pensarlo; podrías dividir al grupo de amigas.
Así, los temas entre amigas sólo quedan, en chismes de vecindad, quejas sobre la familia y uno que otro chiste picante, para contrarrestar el jugo de naranja de la mañana. Los temas que podemos hablar entre nosotros las mujeres, fueron elegidos hace más de un siglo y siguen casi inalterables. Por supuesto, no niego que el basto acceso a la información, ha cambiado a las últimas generaciones, pero aún así el peso de la cultura sigue siendo más fuerte.
Entonces viene aquí el aborto, un tema para el que gracias a Dios, se puede opinar aunque, se lea poco y se cuente con poca investigación. Tomar partido por alguno de los dos bandos, también es sencillo. Lo que en mi punto de vista, en realidad esconde la obsesión por éste tema, es que le permite a la mexicana promedio, salir de los aburridos temas que normalmente están en nuestro temario escolar. Es un tema controversial, diferente, que nos mueve, que nos saca de la monotonía , acostumbradas siempre a hablar de hombres, hombres guapos, hombres guapos pero infieles; encontrar el amor de tu vida por medio del hilo rojo o por medio de señales del destino.
Hagamonos un favor y escuchemos a esa amiga, que adora hablar sobre la conquista de México, la que ilumina su mirada cuando habla de las matemáticas. Escuchemos sin burlarnos ó sentirnos inferiores por no tener idea de lo que hablan. Pongamos atención a esa amiga que se atreve a platicarnos del trauma que la marco de por vida. Tal vez en futuro, además de hablar de madres solteras, aborto y rebajas de fin de temporada; logremos hacer un debate de cuatro horas, sobre el movimiento del sesenta y cuatro. Motivemenos entre nosotros a lograr más. No basta con decir que somos valiosas, únicas e inteligentes y decirles a nuestas amigas que sus novios no las merecen. En serio no es suficiente, debemos ser más.
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